Qué es Sponsorship y cómo potencia tu estrategia de marketing

August 4, 2025

En marketing, las marcas que logran conectar de verdad con la gente no siempre son las que más gritan en redes o invierten en anuncios. Muchas veces son las que se meten en el mundo de sus clientes de manera natural, sin interrumpir, acompañando momentos que importan.

Ahí entra en juego el sponsorship, o patrocinio. Seguro lo viste mil veces: la marca que aparece en un recital, en la camiseta de tu equipo, en un festival gastronómico, o incluso en un podcast que escuchás todos los días. Y si está bien hecho, lo primero que pensás es: “Qué bien que encaja acá”. Esa es la magia del sponsorship.

Qué es sponsorhip

Qué es realmente el sponsorship

En palabras simples, es un acuerdo donde tu marca apoya un evento, persona o proyecto con dinero, productos o logística, y a cambio obtiene visibilidad frente a la gente correcta.

A diferencia de la publicidad que corta un video o te aparece en un banner sin que lo pidas, el sponsorship se integra en la experiencia. No interrumpe: acompaña. Por eso genera una conexión emocional más fuerte.

Imaginá que tu marca está en el festival de música más esperado del año. La gente que pasa un gran momento también te ve a vos ahí, y eso te asocia con una emoción positiva que un anuncio común nunca lograría.

Tipos de sponsorship que funcionan

No todos los patrocinios tienen el mismo impacto, y elegir el tipo correcto es lo que define si tu inversión va a generar resultados o solo un logo perdido entre otros.

Sponsorship deportivo

  • Por qué funciona: El deporte genera emociones fuertes y audiencias fieles. Si tu marca logra vincularse con esas pasiones, la recordación es altísima.
  • Ejemplo: Las marcas de bebidas deportivas o indumentaria que aparecen en camisetas de fútbol logran que millones de personas las vean repetidamente en contextos de emoción y orgullo.
  • Tip estratégico: No siempre necesitás un equipo de primera división. Patrocinar ligas locales, torneos amateurs o academias puede darte un vínculo mucho más cercano con la comunidad y un costo menor.

Sponsorship cultural

  • Por qué funciona: Conecta con momentos que la gente atesora. Un recital, una feria gastronómica o una obra de teatro no solo son eventos: son recuerdos.
  • Ejemplo: Una marca de café que acompaña un festival de cine independiente se posiciona como la bebida que inspira creatividad y disfrute cultural.
  • Tip estratégico: Apostá a experiencias “instagrammeables”. Si tu marca está presente en un stand llamativo o en un photo opportunity, el público se transforma en embajador orgánico en redes sociales.

Sponsorship digital

  • Por qué funciona: Hoy la atención está en los creadores de contenido, streamers y podcasts. Integrarte de forma natural en su contenido no interrumpe: acompaña la experiencia diaria del usuario.
  • Ejemplo: Una fintech que patrocina a un streamer de gaming logra que la audiencia confíe más en la app porque viene recomendada por alguien que admiran.
  • Tip estratégico: Elegí embajadores alineados a tus valores, no solo a tu target demográfico. La autenticidad es clave para que la audiencia perciba el patrocinio como genuino.

Sponsorship corporativo o B2B

  • Por qué funciona: En sectores profesionales, aparecer en conferencias, webinars o ferias te posiciona como líder de opinión y te abre la puerta a contactos de alto valor.
  • Ejemplo: Una empresa de software que patrocina un evento de transformación digital no solo gana visibilidad, también genera leads calificados de forma orgánica.
  • Tip estratégico: No te quedes en un simple logo en la cartelería. Proponé charlas, workshops o demostraciones para que tu marca se asocie a expertise y soluciones concretas.

Por qué apostar al sponsorship

El sponsorship no es solo poner tu logo en un evento. Si lo trabajás estratégicamente, puede transformar la percepción de tu marca y abrirte a clientes que hoy ni saben que existís.

Conexión emocional y recordación de marca

Las personas recuerdan más lo que viven y sienten que lo que leen en un anuncio. Si tu marca está presente en un momento positivo —como un recital, una victoria deportiva o un contenido que disfrutan—, se graba en la memoria de forma natural.

Alcance altamente segmentado

A diferencia de una campaña masiva que dispara a todos, el patrocinio te pone frente a gente que ya comparte un interés relevante.

Ejemplo: si tu marca vende accesorios para runners, estar en una maratón local es llegar directo a tu cliente ideal sin gastar en audiencias que no corren.

Generación de confianza y autoridad

Asociarte con eventos o personas reconocidas transfiere parte de su prestigio a tu marca. La audiencia percibe: “Si esta marca está acá, debe ser confiable”.

Contenido y viralidad orgánica

Cada patrocinio bien pensado genera oportunidades de contenido visual y social media. Desde fotos en un evento hasta menciones en un podcast, multiplicás la exposición sin pagar cada impresión como en la publicidad tradicional.

Diferenciación frente a la competencia

En mercados saturados, estar presente en los momentos que tu competencia no vio venir te da ventaja. Incluso en industrias tradicionales, el sponsorship puede sacarte del montón.

Oportunidad de medir y escalar

 Con los formatos digitales y los eventos híbridos, hoy podés medir:

  • Alcance en redes sociales y prensa
  • Menciones y engagement del público
  • Leads generados o ventas asociadas
  • ROI del patrocinio vs. otros canales

Cuando el sponsorship está bien elegido y ejecutado, deja de ser un gasto de visibilidad para convertirse en un motor de crecimiento y fidelización.

sponsorhip y marketing digital

Cómo hacer un patrocinio que valga la pena

Un buen sponsorship no se trata solo de poner tu logo y esperar magia. Tiene un proceso que se recomienda seguir:

  1. Definí objetivos claros: ¿buscás visibilidad, ventas, posicionamiento?
  2. Elegí bien dónde estar: asociate solo a eventos o personas que compartan valores y público con tu marca.
  3. Negociá un intercambio real: lo que vos das (dinero, productos, soporte) tiene que equilibrarse con lo que recibís (visibilidad, presencia en redes, espacios físicos).
  4. Medí resultados: sin métricas, no sabés si funcionó. Alcance, interacciones, leads y ventas te dirán si la inversión rindió.

Cómo medir si tu patrocinio funcionó

Invertir en sponsorship sin medir resultados es como lanzar una campaña a ciegas. Saber si tu patrocinio funcionó va mucho más allá de ver tu logo en un cartel: necesitás comprobar que impactó en tu audiencia, que generó interacción y, sobre todo, que aportó a tus objetivos de negocio.

Definí KPIs antes de empezar

El error más común es querer medir resultados después de activar el patrocinio. Antes de firmar un acuerdo, preguntate:

  • ¿Quiero generar ventas o solo posicionamiento?
  • ¿Busco leads, seguidores en redes o visitas al sitio web?
  • ¿Espero impacto a corto plazo o recordación de marca en el tiempo?

Por ejemplo: si patrocinás una carrera de running, podés definir como KPI cuántos corredores se registran a tu newsletter con un QR en el stand de tu marca.

Medí el alcance y la visibilidad de tu marca

Acá entran los números duros:

  • Cantidad de asistentes al evento físico o virtual.
  • Impresiones en medios y redes sociales: ¿cuántas personas vieron tu marca?
  • Menciones orgánicas en publicaciones, fotos o videos de los asistentes.

Tip práctico: Pedí siempre al organizador un reporte de visibilidad con fotos, métricas digitales y menciones en prensa. Esto te ayuda a justificar el ROI.

Analizá el engagement generado

No alcanza con que la gente vea tu marca: querés que interactúe.

  • ¿Hubo personas que participaron de tus activaciones, sorteos o juegos?
  • ¿Aumentaron tus seguidores, interacciones o menciones en redes sociales?
  • ¿Lograste que visiten tu web o descarguen un contenido?

Un buen indicador de éxito es cuando los asistentes se llevan tu marca como experiencia, no solo como publicidad pasiva.

Medí las conversiones y ventas asociadas

Si tu patrocinio tiene foco en performance, es clave rastrear:

  • Códigos de descuento o cupones exclusivos del evento.
  • Tráfico web con UTM específicas para cada activación o QR.
  • Incremento de ventas durante y después del patrocinio.

Por ejemplo, si patrocinás un festival gastronómico y entregás un código “FESTIVAL10” para comprar online, podés medir con precisión cuántas ventas vinieron de ese evento.

conversion sponsorship

Evaluá el impacto en el valor de marca

No todos los beneficios son inmediatos. Algunos patrocinadores apuntan a fortalecer percepción y confianza. Para medirlo:

  • Hacé encuestas de recordación de marca antes y después del evento.
  • Medí la percepción positiva de la marca en comentarios o reseñas.
  • Evaluá si aparecés más en conversaciones o si te mencionan en medios relevantes.

Un ejemplo claro: cuando Red Bull patrocina deportes extremos, no espera ventas instantáneas de latas, sino reforzar su identidad de marca asociada a la adrenalina y la energía.

Calculá el ROI (Retorno de la inversión)

Finalmente, si querés números claros, calculá el ROI, te doy un ejemplo:

Si la inversión fue de USD 5.000 y generaste USD 12.000 en ventas, tu ROI fue del 140%. 

Fórmula: ROI = (Ganancias obtenidas por el patrocinio – Inversión realizada) ÷ Inversión realizada x 100

Tip pro: Sumá también el valor publicitario equivalente (VPE), es decir, cuánto hubieras tenido que pagar en publicidad para tener la misma exposición. Esto ayuda a dimensionar el impacto real del patrocinio.

Con este enfoque, tu marca no solo patrocina: aprende, optimiza y crece con cada acción, evitando inversiones a ciegas.

Sponsorship: cuando tu marca deja de interrumpir y empieza a acompañar

Al final, el buen patrocinio es aquel que la gente siente como parte de su experiencia. Es la diferencia entre “me mostraron un anuncio” y “esta marca estuvo conmigo en un gran momento”.

En Imactions, ayudamos a que las marcas hagan justamente eso: dejar de interrumpir y empezar a crear conexiones reales que se transforman en resultados.

Compartir en: